YAKIMA (Agencias) – A nivel nacional, las muertes por sobredosis anuales de los opiáceos como la heroína y los analgésicos con receta se han disparado en los últimos años, alcanzando los 33.000 en 2015, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. En el condado de Yakima el año pasado, cinco de las 26 muertes por sobredosis involucraron heroína, de acuerdo con el forense del condado.
Pero la epidemia de opioides no sólo afecta a las vidas de los adictos. Daña a las familias, llevando a problemas de desarrollo y de comportamiento en los niños, separación de los hijos de los padres, y perjudica el sistema nacional de padres de crianza.
Mientras que el Valle de Yakima no ha visto incrementar considerablemente el nivel de muertes por opiáceos en estados del Oeste como Virginia y Ohio, la epidemia sin embargo, está causando significativos daños en las familias locales y los servicios sociales.
