Los Ángeles (EE.UU.), 8 may (EFE).- El regreso de la WNBA, que el viernes empezó su temporada 2022, ha coincidido con una defensa del derecho al aborto en Estados Unidos en los últimos días por parte de las jugadoras y de la liga después de que se filtrara un borrador de un fallo del Tribunal Supremo que revocaría la protección del aborto a escala federal.
“La WNBA cree que todas las mujeres tienen el derecho de autonomía sobre sus cuerpos y el justo y en igualdad de condiciones acceso a la atención sanitaria”, dijo la liga en un comunicado.
“Debemos actuar también para proteger los derechos de las mujeres, y las elecciones tienen consecuencias. Por eso el compromiso cívico y el derecho al voto seguirán estando en nuestro foco mientras iniciamos la temporada 2022 de la WNBA”, añadió.
Jugadoras de la WNBA como Sue Bird (Seattle Storm) o Tianna Hawkins (Washington Mystics) también mostraron su tristeza o enfado en las redes sociales ante la posibilidad de que el Tribunal Supremo elimine la protección del derecho al aborto vigente desde 1973, algo que permitiría a los estados prohibir las interrupciones del embarazo.
El equipo de las Atlanta Dream también expresó su rechazo.
“En las Atlanta Dream apoyamos fundamentalmente el derecho de una mujer a tomar decisiones sobre su propio cuerpo”, dijo el conjunto en una nota de prensa.
“Si Roe v. Wade (la sentencia de 1973 que salvaguarda el derecho a abortar) es revocada, esto dañará a las mujeres y, de forma desproporcionada, a las comunidades marginalizadas. Nosotras prometemos continuar elevando las voces de mujeres y chicas”, añadieron.
