Por Anahí Hernández:
El jengibre es una planta con flor, nativa del suroeste asiático, India y China. Utilizada desde tiempos ancestrales en la cocina, y como planta aromática y medicinal. De la familia de las zingiberáceas (al igual que la cúrcuma y el cardamomo). Esta planta puede alcanzar hasta un metro de alto, es considerada especia, siendo de las más codiciadas y deliciosas del mundo.
¿Qué tiene esta planta que la hace tan popular? El jengibre, considerado un “super alimento”, contiene alto contenido de Gingerol, el cual es su ingrediente bioactivo. Cuenta con beneficios anti inflamatorios y antioxidantes. El jengibre era utilizado en la farmacopea china como tónico digestivo, ayudando a tratar la indigestión crónica y la diarrea, debido a que aumenta la flora intestinal beneficiosa, también es utilizado para disminuir cólicos menstruales, Incluso era y es utilizado en enfermedades respiratorias, como remedio para la tos, así como antigripal.
Además disminuye y previene las náuseas (en este caso superando incluso a la medicina convencional). Gracias a sus efectos anti-inflamatorios, puede ayudar a combatir la osteoartritis. Contribuye a disminuir el nivel de azúcar y colesterol en sangre, y por lo tanto puede ayudar a disminuir riesgos de enfermedades cardiacas, también estimula la circulación sanguínea,
¿Más beneficios? Puede ser utilizado para disminuir el dolor muscular después del ejercicio. Estudios sugieren que podría mejorar la función cerebral y proteger contra el Alzheimer, así como a disminuir el riesgo de infecciones, ya que el extracto de este inhibe el crecimiento de muchos tipos de bacterias.
Por mencionar algunos de sus nutrientes encontramos: carbohidratos, grasas, ácido oxálico, flavonoides, vitaminas como la niacina y la vitamina C, además contiene múltiples minerales y aminoácidos como arginina y triptófano que son necesarios para el bienestar físico, emocional y mental. La deficiencia de estos aminoácidos puede desencadenar procesos como depresión, insomnio, ansiedad, trastornos alimenticios y psicológicos.
El jengibre puede utilizarse en infusión, entero, rallado o en polvo. Brinda un sabor picante, y dependiendo de la cantidad que se utilice puede dar un sabor dulce o amargo a las comidas. Encaja perfecto para condimentar carnes, pescado, purés y salsas.
En exceso puede causar gastritis, por lo que no se recomienda su uso excesivo, aunque en cantidades adecuadas es beneficioso para usarlo en problemas de úlcera gástrica causada por la bacteria H. Pylori. Tampoco se recomienda a pacientes con tratamiento anti-agregante.
Recuerda que todo en exceso es dañino, por lo que es necesario acudir a un profesional siempre, para que pueda orientarte en la toma o consumo recurrente de sustancias, plantas o medicamentos. Disfrutar de lo que la naturaleza nos brinda de manera adecuada, es la mejor forma de mejorar nuestra salud.
