Trump encarga al nuevo titular de Salud atajar la “plaga” de opiáceos en EEUU

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Washington (EFEUSA).- El presidente, Donald Trump, encargó a su nuevo secretario de Salud, Alex Azar, ponerse “duro” con las farmacéuticas y los hospitales para atajar la crisis de adicción a opiáceos que se ha convertido en una “plaga” en el país, además de rebajar los precios de los fármacos con receta.
Azar, un exdirectivo de la multinacional farmacéutica Eli Lilly and Co., se convirtió en el nuevo secretario de Salud, un cargo para el que fue confirmado la semana pasada por el Congreso y en el que reemplaza a Tom Price, quien dimitió tras conocerse que usó aviones privados para viajes oficiales.
Durante la ceremonia en la que Azar juró el cargo, Trump aseguró que el funcionario “liderará” los esfuerzos de la Casa Blanca ante la “emergencia nacional de adicción y muerte debido a los opiáceos”.
“Vamos a ser muy duros con las compañías farmacéuticas y los doctores en ese tema, porque lo que está pasando es increíble. Y finalmente, pondremos fin a esta plaga en las vidas de familias y comunidades”, dijo Trump.
Según datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), 64.000 personas murieron en 2016 por sobredosis de opiáceos (incluida la heroína) en Estados Unidos, lo que supone 175 personas al día y siete víctimas mortales cada hora.
En los últimos seis años, las muertes por sobredosis se han convertido en la causa más común de muerte violenta en EEUU, por encima de los accidentes de tráfico o las armas, y la venta de analgésicos con receta se ha casi cuadruplicado desde 1999.
En octubre, Trump declaró “emergencia de salud pública” el abuso de analgésicos opiáceos, lo que permite destinar fondos ya existentes a nivel estatal y federal a la lucha contra la adicción.
Sin embargo, el presidente no destinó nuevos fondos a este problema, lo que provocó críticas de la oposición demócrata, que consideró su acción como un “gesto vacío”.
Trump también prometió hoy que Azar trabajará para rebajar “muchísimo” los precios de los medicamentos con receta en Estados Unidos, y “deshacer la red enmarañada de intereses especiales que están haciendo que aumente” el coste de los fármacos.
“Hay países vecinos que pagan una fracción minúscula de lo que nosotros pagamos por exactamente la misma pastilla fabricada en el mismo lugar”, denunció el presidente.
Trump no mencionó en el acto la que ha sido otra de sus grandes prioridades de Gobierno: el esfuerzo para desmantelar y sustituir “Obamacare”, como se conoce popularmente a la reforma sanitaria del expresidente Barack Obama.
Los republicanos, pese a controlar ambas cámaras del Congreso, no han sido capaces todavía, tras varios intentos, de ponerse de acuerdo sobre una nueva ley de salud, y su fracaso en esta materia fue el más sonado del primer año de mandato de Trump.

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