Por Raoul Lowery Contreras
“Guahalote” es la palabra india náhuatl (mesoamericana) para el ave grande que fue considerada el símbolo nacional por Benjamin Franklin. Perdió al águila calva.
Además, el Sr. Franklin es famoso por su desprecio por cosas ajenas a la América colonial, como los inmigrantes de Alemania. En su defensa, puede no haber sabido que el pavo domesticado fue domesticado por los indios mexicanos siglos antes de que cualquier inglés pensara seguir al odiado español a través del Océano Atlántico para encontrar y encontrar un nuevo mundo.
Sí, esa majestuosa y gigantesca ave conocida como el pavo fue domesticada por los indios mexicanos en el Valle de México, probablemente en el Valle, junto con maíz, calabacines y muchos otros alimentos que utilizamos para celebrar el Día de Acción de Gracias. Creemos que la patata dulce vino de la península de Yucatán en el México antiguo y moderno.
Los indios lo llamaron “Guahalote”, el español lo llamó “pavo” (paw-voh). Los nutricionistas lo llaman proteína. En el Nuevo Mundo no había ganado ni animales similares al ganado que se domesticaron en una fuente de proteínas masiva, ya que el ganado e incluso los caballos estaban en el Viejo Mundo de Europa y el Medio Oriente experimentado. Los franceses de hoy disfrutan de la carne de caballo, al igual que los perros mascotas estadounidenses.
De regreso a Franklin y sus compañeros ingleses cuya idea de aves no domesticadas era del tamaño de pollos. Los pavos que encontraron los colonos eran magros, más grandes que los pollos; Aves que tenían un pecho que era una comida en sí misma. También se domesticó fácilmente para que los miles de pavos salvajes magros pudieran ser encerrados y domesticados en la primera generación. También podrían crecer después de ser alimentados con maíz y otros cereales, más grandes que sus primos salvajes que vivían de la tierra en una tierra donde el maíz no es natural en la naturaleza. Los coloniales descubrieron lo que descubrió el indio mesoamericano; Los “rebaños” de pavos podrían alimentar a mucha gente. Los colonos los llamaban rebaños.
El pavo ocupa el segundo lugar que los pollos en la dieta mundial de aves, pero es el número uno en nuestras mesas el Día de Acción de Gracias. Es una usurpación más de la comida mexicana en nuestro plato de Acción de Gracias junto con el maíz y las batatas. Agregue a eso las papas de Perú y los arándanos de Nueva Inglaterra y uno finalmente llega a una comida “americana”.
Carne blanca; Carne oscura, suena como la pregunta de raza de América. ¡Reír en voz alta!
Disfrútala. ¡Feliz Día de Acción de Gracias!
