SEATTLE (Agencias)—Algunos legisladores están apuntando a una reciente decisión de la Corte Suprema del estado que pone la responsabilidad en los condados para determinar si el agua está legalmente disponible en ciertas áreas rurales antes de que emitan permisos de construcción.
Un proyecto de ley patrocinado por la senadora Judy Warnick, R-Moses Lake, enmienda partes de la ley estatal en el corazón de la decisión, conocida como la decisión de Hirst. Funcionarios del condado, constructores, empresas y grupos de agricultores están entre los que apoyan la medida, mientras que grupos ambientales y tribus se oponen a ella.
Un proyecto de ley patrocinado por el Senador John McCoy, D-Tulalip, apoya la decisión judicial y establece un programa para ayudar a los condados a encontrar maneras de cumplir con los requisitos.
En octubre, el Tribunal Supremo dictaminó que el condado de Whatcom no protegía los recursos hídricos permitiendo que nuevos pozos redujeran el flujo en arroyos para peces y otros usos.
A raíz de la sentencia, algunos condados han detenido temporalmente cierto desarrollo rural, mientras que otros cambiaron los criterios para obtener un permiso de construcción.
En cuestión es una lucha para equilibrar las necesidades de la competencia de las personas y la vida silvestre de agua limitada, un desafío que ha jugado en todo el estado durante años.
